abrazavientos
lunes, 23 de agosto de 2010
miércoles, 2 de diciembre de 2009
SIN TÍTULO (26.II.2009)
se esforzaba el cuadrado
y todo lo que podía hacer
era rectangulizarse
y cuando
buscaba ser al menos
óvalo
sólo le salía un rombo
se achataba
y parecía un cilindro
pero no escapaba
de su destino de paralelos
a veces era un trapecio
a veces un trapezoide
confuso y despatarrado
se esforzaba el cuadrado
pero la verdad
le faltaba blandura
para transformarse
en círculo
Mario Lóriga
(26-II-2009)
SIN TÍTULO (sin fecha, 2009)
me fui
soñando el día
el día se fue
detrás del sol
que se desinteresaba de nosotros
ensimismado en su rumbo de universos
fui
abandonado
aquí en este
circulo de horizontes
vertiginoso declinar de estrellas
soñando sueños de soles y de días
aquí en este páramo nocturno
abandonadísimo
de vagabundo por mi alma
esperando a que el este
nos teja por piedad
otra vez la luz
y me fui en éxodo
para hacerme pueblo
en algún otro rincón
soñando el día
de ser
dueño de la vida
ese día
soñándolo se fue
detrás del sol
Mario Lóriga
(sin fecha, 2009)
SIN TÍTULO (10.XI.2009)
tal vez la delicadeza
era cuestión
de matarse a golpes
bajo la tarde dorada de polvillo
y machear con los labios apretados
que el dolor es un trago de hombres,
tal vez tragar moco y llanto
era camino para crecer
y no llorar como niños
una infancia que no se eligió
no llorar frente a los otros
delante de sus caras terrosas
tal vez lo delicado
era sentarse de espaldas
contra los árboles
a que el mundo se achicharrara
a la hora de la siesta
cuando las lagartijas se escabullen
entre el yuyaje
quizás ser delicado
era no ser nada ni nadie
y quedarse quieto
esperando a que el tiempo
se decidiera
a llevarnos
de aquella
ciudad de arenas.
Mario Lóriga
(10-XI-2009)
SIN TÍTULO (29.V.2009)
el de los equiláteros
andar para siempre
con la misma medida
bajo los eclipses
de las clepsidras
qué chatura
la del polígono
con sus ángulos de
geometría a ras de suelo
y no como los poliedros
con su arrogancia
de triángulos
y cuadriláteros sublimados
si hasta las esferas
alardean de su condición
de cuerpos
de habitantes en el espacio
ya que todo arriba
lleva el temor de su abajo
como los cilindros
que son pozos
o caleidoscópios
y no las líneas
ni curvas ni rectas
que ni paralelas se salvan
de su delgadez
qué soledad
la del punto
por ser parte de todo
por primero
y por único
Mario Lóriga
(29-V-2009)